(continuación de un campamento en la Reserva de Moremi en Botswana o el Paraíso terrenal y un campamento de tiendas en el corazón del Delta del Okavango)
OTRAS FORMAS DE VIAJAR A BOTSWANA
Existen varias formas de viajar a Botswana para ver animales. He conocido algunas de ellas. Me quedo con la primera etapa de mi viaje a la Reserva de Moremi y al Delta del Okavango durmiendo en campamentos en la selva sin ninguna duda.
27 de noviembre
Ahora comienza la tercera etapa más cómoda de nuestro viaje a Botswana recorriendo el Delta del Okavango. Los primeros días hemos instalado un campamento móvil en la Reserva de Moremi durmiendo en la selva en tiendas de campaña. En una avioneta nos trasladamos a otra parte del Delta acomodándonos en un segundo campamento llamado Oddaballs camp. También han sido días maravillosos durmiendo literalmente entre animales que nos han dado más de un susto. Hemos tenido más comodidades que en los primeros días donde no teníamos ni electricidad ni teléfonos y el agua de nuestra ducha improvisada con control. Ahora en otra minúscula avioneta acabamos de llegar al Parque Nacional de Chobe.
Después de casi diez días entre animales y en mitad de la nada volvemos a la civilización.
El Parque Nacional de Chobe toma su nombre del río que delimita su frontera norte, y que ejerce también de frontera entre Botswana y Namibia en esta parte del país.
El Parque se encuentra situado al norte muy cerca de las Cataratas Victoria. Tiene una extensión aproximada de 11.700 km² protegidos desde el año 1968 en que se proclamó Parque Nacional, lo que le convierte en la tercera reserva más grande de Botswana, por detrás de la Reserva Central del Kalahari y del Parque Transfronterizo de Kgalagadi.
El Parque Nacional de Chobe es famoso por su gran concentración de elefantes. Se puede considerar que se trata de la mayor concentración de elefantes de África.
Se divide en cuatro áreas distintas caracterizadas por ecosistemas únicos. En la parte norte del parque está la ribera del Chobe que lleva agua todo el año albergando la mayor concentración de fauna del parque, además es la parte más accesible. En las otras tres zonas, el acceso es más complicado únicamente con todoterreno o avioneta. La mejor época para visitar el Parque Nacional de Chobe es en la época seca cuando los animales se concentran en torno al agua.
Nosotros para cambiar de tercio y volviendo de la vida salvaje durmiendo en tiendas de campaña ahora nos instalamos en un lujoso lodge llamado “Bakwena Lodge” situado a las afueras del Parque Nacional de Chobe. Llegamos al aeropuerto de Kasane en una avioneta. Nos espera nuestro nuevo guía enviado por el lodge.
Durmiendo en Lodges
Ahora comienza la otra forma de viajar a Botswana para ver animales durmiendo en lodges. Hay mucha diferencia entre los primeros días de nuestro viaje donde no hemos tenido ni móviles, ni manera de cargar baterías, ni luz ni nada de nada pasando miedo durante las noches, intentando conciliar el sueño entre rugidos de leones, zancadas de hipopótamos, risotadas de hienas y barbitar de elefantes a esta otra nueva forma de viajar a este país. En “Bakwena Lodge” tenemos una lujosa ducha llena de aceites, jabones y toallas de diferentes colores pero imposible de igualar a las que nos hemos podido dar en mitad de la nada SIN NADA, solo con el agua que cae de un cubo por la fuerza de la gravedad.
El lodge tiene un restaurante fantástico pero yo echo de menos las comidas de nuestro cocinero en la selva. Estamos rodeados de turistas que vienen a “ver animales a Botswana” la otra forma de conocer las reservas de este país.
Bakwena Lodge es precioso, de esos lugares a los que nosotros no acostumbramos a ir. Nos recibe su staff a la puerta obsequiándonos con unos cánticos y bailes africanos. ALUCINO. Aunque el lodge se encuentra situado al borde del río Chobe y tiene una fantástica terraza a su ribera, no esta dentro del Parque. En el interior del Parque solo hay un alojamiento donde poder dormir. Yo hubiera preferido cien mil veces dormir dentro del Parque.
Nuestra habitación es una pequeña palloza o choza con todo lujo de detalles. Es suntuosa y con aire de safari africano pero yo no lo cambio por mi tienda de campaña ni por mi ducha tipo película “Mogambo” en mitad de la selva. Nadie se puede llegar a imaginar lo que echo de menos no tener NADA. No me gusta nada haber vuelto a la civilización. Veo a la gente como loca consultando teléfonos y leyendo mensajes de washap. Hemos estado aislados varios días y ahora no siento necesidad de saber nada de nada ni de nadie desde este paraíso.
Nada más llegar nos vamos de safari con nuestro nuevo guía. Entramos en el Parque Nacional de Chobe. El Parque es increíble pero nada que ver con lo que hemos vivido con la otra forma de viajar a Botswana. Por lo pronto hay turismo. En la Reserva de Moremi, apenas nos cruzamos con cinco o seis coches de safari durante los días que estuvimos.
Aquí hay varios coches haciendo cola esperando para entrar en el Parque. Se me cae el alma a los pies.
El Parque Nacional de Chobe y el río Chobe son espectaculares. El río se puede recorrer en barco desde donde casi tocas a los animales. También se puede transitar por las pistas en coche. Empieza a caer la tarde y los animales se concentran en las riberas del rio. Esta lleno de chacales, búfalos, hipos, enormes cocodrilos, un sinfín de pájaros y aves pero nada es igual a lo que hemos vivido.
Estoy en uno de los extremos del Parque. Hay muchos animales pero no como en la Reserva de Moremi. Habría que adentrarse más en el Parque para conocer su verdadera fauna.
Hemos pasado dos días en el Parque Nacional de Chobe en un lodge fantástico. Nuestra palloza es increíblemente perfecta. Nos llevan en un coche de safari y navegamos por el río a la caída de la tarde pero NO CAMBIO esto por lo que he vivido en la selva con muchas menos comodidades, sin lujo pero viviendo y sintiendo la naturaleza de una forma única que sólo se puede vivir de esa manera.
Hemos visto leones esta mañana desde lejos, estaban dormidos y apenas se les podía ver, atestados de guiris hasta arriba. No me gusta la idea de ser uno más. Volveremos más tarde, los leones no se levantarán hasta que la tarde caiga.
Nos paramos en una zona para hacer un picnic, esta llena de babuinos y de coches con gente haciendo fotografías.
A pesar de irme con esta idea de haber conocido el Parque Nacional de Chobe de una manera superficial he disfrutado muchísimo. No ha sido buena idea dormir fuera del parque porque para vivir profundamente la naturaleza hay que vivirla desde dentro.
Mañana nos vamos a las Cataratas Victoria en Zimbabue
