Atrévete a recorrer Sudafrica y a disfrutar de su fauna desde tu propio coche
Viajar en tu coche a Sudáfrica
Sudáfrica es un país maravilloso, bellísimo y muy interesante. Sus increíbles paisajes constituyen una de las imágenes más sugerentes de África. Tiene fantásticos enclaves, incontables secretos que descubrir, toda la fauna inimaginable con la posibilidad de hacer todo tipo de safaris y los más increíbles atardeceres que he visto en mi vida. Si tuviera que elegir un país del que me enamoré desde el primer momento, ese sería Sudáfrica.
Viajar por Sudáfrica es algo imposible de olvidar. Además, es muy fácil moverte y recorrerlo sin tener que llevar un viaje organizado.
Sudáfrica es un país que puedes visitar tranquilamente y en tu propio coche sin ningún problema
Sudáfrica enamora y engancha. He visitado cuatro veces Sudáfrica y solo pienso en volver.
Lo primero que debes conocer si decides viajar a tu aire por Sudáfrica es la pagina oficial de todos los parques nacionales sudafricanos
En esta página encontrarás todo lo relativo a cada parque nacional, toda la información, distancias, rutas con rangers, campamentos para dormir, todo. Si decides recorrer Sudáfrica, sólo y a la aventura, esta pagina para ti es muy importante. Sudáfrica esta llena de parques nacionales y reservas de animales y seguro que durante tu viaje vas a parar en más de una.
La joya de la corona es el Parque Nacional del Kruger y después le sigue el Desierto del Kalahari que se llama Parque Kgalagari Transfortier Park. Son indescriptibles por maravillosos.
El Kruger es uno de los verdaderos santuarios de la vida salvaje de Sudáfrica y del mundo, además es ideal para ir de safari por tu cuenta. Tiene una de las mayores poblaciones de leones, elefantes, cebras, jirafas, antílopes, hipos y rinocerontes del planeta. El Desierto del Kalahari o el Parque Kgalagari Transfortier Park es un parque lejano y remoto que hace frontera con Namibia y Botswana que ofrece uno de los mejores avistamientos de depredadores del planeta.
Además, puedes conocer Johanesburgo que es una ciudad muy interesante. Adentrarte y recorrer Soweto, el township o suburbio con cerca de dos millones de personas donde vivió Nelson Mandela durante varios años de su vida.
Si VIAJAS SOLO por Sudáfrica podrás disfrutar de vastas extensiones de sabana, salpicadas de bellÍsimas acacias de copas planas, repletas de manadas de animales en el Kruger.
También podrás disfrutar de maravillosas playas donde siempre brilla el sol con colonias de focas y aves marinas o penínsulas escarpadas con vistas a amplias bahías donde viven o pasan por sus aguas delfines y ballenas.
En Sudáfrica podemos ver ballenas con mucha facilidad en varios lugares míticos, uno de ellos es en la Bahía de Walker. De julio a noviembre más de quinientas ballenas de sur se reúnen en esta bahía. Se las puede ver desde tierra firme ya que pasan por delante de tus narices por ejemplo en Hermanus o Gansbaai o coger un barco acercándote a ellas y verlas desde el oceáno.
También podrás alucinar con las salvajes dunas rojas del remoto Parque Kgalagari Transfortier Park en el noroeste del país, o adentrarte a las tierras vinícolas del Western Cape, conociendo sus bodegas y sus vinos.
Puedes subir a Table Mountain pudiendo disfrutar de Ciudad del Cabo a tus pies. Las flores silvestres en primavera de Namaqualand son maravillosas. Además, Sudáfrica tiene los restos de ocupación humana prehistórica y el arte rupestre más prolífico con 20.000 años de antigüedad, por ejemplo, los fósiles de las Cuevas de Sterkfontein al oeste de Johanesburgo.
Además, de su belleza, Sudáfrica es un país muy interesante para descubrir y adentrarte en su increíble y fascinante historia, el régimen del Apartheid. Imprescindible conocer el Museo del Apartheid en Johanesburgo.
He viajado cuatro veces por Sudáfrica, las cuatro veces por mi cuenta, a la aventura, inventando y diseñando con un buen mapa el camino y conduciendo mi coche con un útil GPS.
Estas son las cuatro distintas opciones de viaje que te propongo. Cada uno de los viajes que he hecho a Sudáfrica han sido etapas de diez días más o menos. Seguro que tu dispondrás de más tiempo.
La primera propuesta es hacer Johanesburgo-Parque Nacional Kruger-Maputo (Mozambique)-Johanesburgo
Este fue el itinerario de la primera vez que volamos a Johanesburgo en un vuelo directo con Iberia. En el aeropuerto recogimos el coche que previamente habíamos alquilado. Era un coche pequeño y barato. Del aeropuerto de Johanesburgo nos plantamos en cuatro horas en Nelspruit, una de las ciudades de entrada al Parque Nacional del Kruger.
Nelspruit se encuentra a 355 km de Johanesburgo y es la capital de Mpumalanga, una de las provincias mas pequeñas de Sudáfrica. No nos dio tiempo a entrar esa misma noche al Kruger y poder dormir ya en uno de sus campamentos que hubiera sido lo ideal porque el parque cierra sus puertas sobre las cinco y media de la tarde. Nelspruit es una ciudad que no tiene nada interesante. Tuvimos que dormir en un hotel entrando a la mañana siguiente al Parque Nacional del Kruger.
El Parque desde que entras es una gozada. Tiene todo tipo de fauna, elefantes, rinocerontes, hipos, hienas, leones, etc y alucinas desde tu propio coche.
El Parque Nacional del Kruger tiene una vida animal extraordinaria muy diversa que junto a su gran extensión lo convierte en una de las grandes reservas de animales del planeta. Se han registrado 147 especies de mamíferos (la segunda cifra más alta de todos los parques nacionales africanos). Cuenta con una amplia red de caminos y zonas de descanso, campamentos para dormir que no interfieren en la fauna. Es muy fácil moverte por el parque en tu propio coche. Lo ideal es ir cambiando de campamento y dormir cada noche en uno diferente.
El Kruger tiene muchos campamentos para dormir. Aconsejo llevar reserva desde la página de los parques sudafricanos.
https://www.sanparks.org/tourism/availability
porque luego desde la administración del parque si hay disponibilidad, es fácil ir cambiando de campamento. Los parques sudafricanos están muy bien organizados y funcionan de maravilla. Venir sin nada reservado es arriesgarte porque hay campamentos que son pequeños y tienen poca disponibilidad. En el Kruger lo importante es tener sitio donde dormir.
La vida del parque consiste en poder disfrutar de los animales. Para eso tienes tu propio coche. El parque tiene unas rutas fantásticas para que lo puedas recorrer a tu aire, sin ningún problema pero además, pone a tu disposición la posibilidad de hacer safaris acompañado de rangers. Los safaris se reservan en el mismo parque durante la tarde anterior. Aconsejo las rutas a pie que son fantásticas por la selva. También existe la posibilidad de coger un ranger privado.
Tras cinco días recorriendo campamentos en el Kruger moviéndonos en nuestro coche, nos acercamos a Maputo, la capital de Mozambique que se encuentra a unos cien kilómetros del Kruger. Maputo siempre sorprende por bella y por interesante. Es la ciudad que volvió loco a Henning Mankell. El océano Indico baña la ciudad. Dos días fantásticos para conocer Maputo, pasear por sus calles, conocer sus mercados, acercarse a sus playas y de vuelta a Johanesburgo.
Johanesburgo es una buena opción para hacerte idea de como funciona Sudáfrica. Es una ciudad muy interesante.
Dicen que Johanesburgo es una ciudad peligrosa pero si tienes cuidado y solo vas por los barrios aconsejados, no tiene porque pasar nada. Nosotros nunca hemos tenido el más mínimo problema. Las veces que hemos parado por Johanesburgo, nos hemos quedado a dormir en un barrio muy bonito y tranquilo, Melville, preciosismo en la guest house de una periodista sudafricana que estaba muy bien. En este barrio hay varias guest houses.
La segunda propuesta para otra escapada de diez días,
Johanesburgo-Parque Nacional Kruger-Santa Lucia-Durban-Johanesburgo
La segunda ruta que te propongo es el itinerario de nuestro segundo viaje a Sudáfrica. El Kruger nos dejo tan fascinados que quisimos volver con nuestros amigos. De nuevo volamos a Johanesburgo con Iberia desde Madrid. Intentamos de nuevo, pisando fuerte el acelerador de nuestro coche alquilado en el mismo aeropuerto, llegar a Nelspruit y entrar en el Kruger a dormir pero no nos dio tiempo, nos cerraron la puerta en las narices y tuvimos que buscar de nuevo un sitio para dormir en la ciudad. Mis amigos alucinaban mientras cenábamos escuchando a cientos de miles de ensordecedoras ranas en una guest house de Nelspruit.
Aconsejo cinco o seis días recorriendo el Parque Nacional del Kruger. A mi siempre me han sabido a poco.
Nuestra ruta siguió hasta Durban atravesando Suazilandia y parando en Santa Lucia, una pequeña población para avistar ballenas. Esta parte de las costa siempre ha sido uno de los destinos turísticos más populares de Sudáfrica gracias a sus maravillosas playas de aguas tibias.
Hicimos noche en Santa Lucia durmiendo en una preciosa guest house. Cuando aparcamos el coche, la dueña de la guest house nos dijo que ¡ojo¡ con ir a coger algo al coche por la noche porque merodeaban los guepardos y que a la piscina se acercaban a veces hipopótamos a beber. Creí que nos tomaba el pelo pero a la mañana siguiente en su despacho puede ver unas fotos con los hipos bebiendo en la piscina que teníamos en nuestras narices. En Sudáfrica hay animales donde menos te lo esperas.
Durban es la tercera ciudad más grande de Sudáfrica. En Durban vive una importante comunidad india que da color a esta ciudad. En los mercados encontrarás entre otras cosas, las mejores especias y curries que uno se pueda imaginar.
No hemos buceado rodeados de tiburones pero en la costa hay varios sitios donde es posible. Te meten en una jaula y te bajan al fondo. La costa del Índico es maravillosa y Durban fantástico. En el camino desde el Kruger hay guest houses por todas partes.
La ruta acaba como acabo nuestro primer viaje a Sudáfrica, volviendo a Johanesburgo para que nuestros amigos conociesen esta fantástica ciudad. Nos adentramos de nuevo en Soweto, visitamos el Museo del Apartheid, recorrimos mercados de artesanos y sobre todo intentamos conocer la vida social y cultural que tiene esta burbujeante e inquietante ciudad.
SUDAFRICA ENGANCHA, no tengo ninguna duda y pronto volvimos para conocer otra parte de este enorme país. Queríamos conocer el remoto e increíble Desierto del Kalahari, uno de los mejores lugares para ver depredadores en el mundo. Nos fascinó.
Esta es mi tercera propuesta de unos diez días de duración, nuestro tercer viaje a Sudáfrica,
Johanesburgo-Upington-Parque Transfortier Park-Kimberley-Johannesburgo
El objetivo de este viaje era conocer el Desierto del Kalahari, increíble, fantástico, todo lo que pueda decir, se queda corto, fascinante y único.
Es el Parque Kgalagari Transfortier Park compartido con Botswana y Namibia.
(https://www.sanparks.org/tourism/availability/). De nuevo volamos con Iberia, Madrid-Johanesburgo. En un coche, otra vez mínimo, alquilado en el aeropuerto nos pusimos en marcha hacia la ciudad de Upington, la entrada al Parque Kgalagari Transfortier Park o Desierto del Kalahari. La distancia entre Johanesburgo y Upington es de casi ochocientos kilómetros, así que hay que hacer noche en el camino pero nos sirvió para conocer el paisaje de este fascinante país.
Upington es una ciudad típicamente sudafricana. Una ciudad trampolín para cargar el coche de comida y bebida que te permitan sobrevivir en el Kalahari. Cargamos las provisiones en los enormes supermercados que hay en la ciudad. No sabíamos que nos íbamos a encontrar en el desierto. Cinco días estuvimos recorriendo los fantásticos campamentos que tiene el Parque Transfortier Park.
A mi me pareció todavía más fascinante que el Kruger. El Kalahari me sedujo desde el primer momento. A diferencia del Kruger, sólo hay turismo local, familias de africaners con sus furgonetas de campismo. En el Kruger hay gente de todo el mundo. Los animales son muy distintos en los dos parques. El Kruger tiene todo tipo de animales mientras que el Kalahari tiene animales propios del desierto, leones, hienas, chacales pero no hay elefantes mientras que el Kruger este lleno de ellos.
En el Parque Kgalagari Transfortier Park, los campamentos son muy pequeños y es imprescindible llevar reservado aunque luego sobre el terreno, puedas ir cambiando de campamento porque si hay sitio, como en el Kruger, no hay problema. Generalmente están situados en plena selva sin ninguna protección de ningún tipo y los animales merodean tu tienda. Solo tienes que seguir unas estrictas normas de seguridad.
Imposible ver más leones sobre todo en los campamentos situados en la parte norte. Te salen al encuentro. Estas cenando a la puerta de tu tienda de campaña haciendo una barbacoa y los chacales pasan al lado, una pasada. Escuchas a las hienas por la noche, rozando tu tienda gritando en la noche, imborrable e inolvidable además de increíble. Para mi, fue mucho más genuino que el Kruger. Este parque pertenece también a la red de parques sudafricanos
https://www.sanparks.org (la dirección para hacer las reservas en los campamentos)
Puedes ir y recorrer el parque en tu propio coche pero las pistas no son tan buenas como en el Kruger. Aquí necesitas un coche mejor. Aconsejo uno de tracción a las cuatro ruedas. Nosotros llevábamos un coche pequeño y pasamos mucho miedo porque nos salieron varios leones al encuentro y nos dimos cuenta que eran más grandes que el coche, además, un automóvil pequeño patina y no puede acceder a las mejores zonas del desierto.
El parque tiene las mismas rutas para hacer con los rangers que tiene el Parque Kruger. Se reservan la tarde antes en el mismo Parque Transfortier Park. Hay como en el Kruger, rutas y safaris para hacer en tu propio coche o en coches de safari del Parque o a pie acompañados de dos rangers armados con fusiles.
Tras cinco inolvidables días de campamento en campamento llenos de anécdotas, y aventura, pusimos rumbo a una ciudad minera, cuna de la extracción de diamantes, la ciudad de Kimberley.
Esta ciudad está situada a unos 470 kilómetros hacia el suroeste de Johanesburgo. Kimberley es una ciudad antigua con un rápido crecimiento en la década de 1870. Su prosperidad se basó únicamente en la extracción de diamantes. La mina se agotó hacía la década de 1930.
La ciudad tiene un Museo Minero muy interesante. El recorrido por la ciudad de Kimberley te introduce en los orígenes de las minas de diamantes en Sudáfrica. Ahora, el agua cubre un inmenso agujero de más de 200 metros de profundidad llamado “The Big Hole”, donde, desde mediados del siglo XIX, muchos aventureros vivieron y murieron en busca de las codiciadas piedras preciosas. Las torres del recinto están abandonadas pero entre 1871 y 1914 se extrajeron de esta gigantesca grieta en la tierra 2722 kilos de diamantes.
Tras disfrutar de Kimberley donde dormimos una noche en una de las varias guest houses que hay por toda la ciudad, pusimos rumbo en nuestro pequeño coche a Johanesburgo.
Imprescindible dejar dos días, por lo menos, para descubrir nuevos barrios de esta interesante ciudad y descubriendo otro de sus suburbios, no tan conocido como Soweto pero muy interesante, “Alexandra”. En este township es imprescindible ir acompañado de un local. Nosotros nos adentramos en sus profundidades de la mano de una ONG local que trabajaba sobre el terreno.
La cuarta propuesta coincide con el itinerario de nuestro cuarto viaje a Sudáfrica,
Madrid – Ciudad del Cabo – Upington – Parque Transfortier Park – Cabo de Buena Esperanza – Ciudad del Cabo – Madrid
El Kalahari nos hipnotizó y volvimos con nuestros amigos al año siguiente. La ruta esta vez fue distinta porque volamos Madrid Ciudad del Cabo, vía Londres con la British Airways.
A mis amigos les puse la cabeza al revés, contándoles las maravillas del Kalahari, así que volvimos a viajar a Ciudad del Cabo todos juntos. Nos salió barato y volvimos al Desierto del Kalahari unos cinco o seis días, recorriendo de nuevo sus campamento. Nos volvió a enamorar pero esta vez tampoco llevábamos el coche apropiado y nos quedamos con ganas de llegar a los campamentos más remotos por lo tanto los más emocionantes.
La única vía de acceso al Parque es por el campamento de mayores dimensiones, Twee Rivieren (Dos Ríos) que se encuentra próximo a la confluencia de los ríos Auob y Nossob, mejor dicho lechos fluviales porque la mayor parte del tiempo no llevan agua. No es extraño ver a un guepardo perseguir a un springbook o a una manada de orices del Cabo atravesar el lecho del río Nossob.
El león de melena negra es el típico del Kalahari
Desde el campamento de Nossob en mitad del parque es muy fácil poder verlos en cuanto te montas en tu coche y recorres su pistas. Te salen al encuentro y también los escuchas rugir por todas partes. Es algo indescriptible que te deja sin palabras.
Abandonando los campamentos del Kalahari, seguimos nuestra ruta hacia Ciudad del Cabo para conocer esta maravillosa ciudad.
Ciudad del Cabo es una de las ciudades más prósperas y boyantes del continente africano. La llaman La California africana. Es una ciudad con mucha vida tanto de día como de noche.
Dejamos algunos días para recorrer la Península de El Cabo que es una franja de tierra de unos 100 kilómetros (Parque Nacional Table Mountain) que culmina en el Cabo de Buena Esperanza. En el extremo meridional de la península, se accede en funicular al viejo faro de Cape Point. Desde este lugar te puedes imaginar que un poco más al sur se encuentra la Antártida.
La vista de Ciudad del Cabo es un espectáculo, las montañas abrigan la ciudad costera. Una imagen difícil de olvidar desde la Table Mountain.
Ciudad del Cabo también es una ciudad histórica vinculada al apartheid. No pudimos acercarnos a Roben Island, la isla – prisión de Nelson Mandela durante la mayor parte de su vida.
Es bonito pasear por el barrio de Bo-Kaap con sus llamativas casas de colores y con su población musulmana. Hace mucho tiempo era donde vivían los esclavos traídos por los colonos holandeses desde Malasia e Indonesia.
En esta costa hay muchos sitios donde avistar ballenas, bucear con tiburones y descubrir pingüinos. Es una pasada. Imprescindible hacer una parada en el puerto de Hout Bay donde se toma un barco para acercarse a ver un islote donde se calientan los leones marinos.
También nos acercamos a conocer Simon’s Town donde se pueden encontrar cientos de pingüinos. Es una maravilla la Reserva Natural del Cabo de Buena Esperanza.
Ciudad del Cabo también esta rodeada de viñedos y de bodegas. Los viñedos de Stellenbosch son magníficos. Recorrimos varías bodegas haciendo catas, una gozada para los amantes del buen vino.
La ciudad tiene maravillosos mercados de artesanía donde se pueden encontrar todos los objetos que te puedas imaginar de toda África.
Durante este viaje también hicimos otra parada para dormir en el Parque Nacional Cataratas Augrabies (https://www.sanparks.org/tourism/availability/)
Estas cuatro propuestas para recorrer Sudáfrica en tu propio coche y a la aventura son pequeñas escapadas de diez días cada una. Seguro que tu dispones de más tiempo para hacer una ruta más ambiciosa.
En Sudáfrica, las distancias son muy grandes. Si tienes más de diez días, una buena opción sería volar a Johanesburgo, allí coger un buen coche (los hay con la tienda arriba para ir de campamento en campamento) visitar el Kruger (cinco o seis días) con reservas en los campamentos.
Desde el Kruger bajar por la costa y recorrer el océano Índico, observando ballenas o haciendo buceo y llegar a Ciudad del Cabo, recorrer la península hasta el Cabo de Buena Esperanza. Esta zona es increíble.
Con más tiempo todavía desde Ciudad del Cabo, se podría llegar a Upington para entrar en el Desierto Kalahari (Parque Kgalagari Transfortier Park) recorriéndolo unos cuatro días. Volver a Johanesburgo para coger el avión de vuelta. Los vuelos internos no son caros.
Otra opción de viaje es ir al Kalahari o al Parque Kgalagari Transfortier Park por la parte Sudafricana desde Johanesburgo y desde allí acceder a Botswana.
Te aconsejo si vas a entrar en los parques que lleves un buen coche, sobre todo en el Kalahari. En la página de los parques sudafricanos, te dan información del coche adecuado para cada campamento. Por ejemplo, en el Kalahari, leímos que había que llevar 4*4 pero no hicimos caso así que no pudimos acceder a todos los campamentos porque nuestro coche patinaba en la tierra. El Kruger tiene mejores carreteras. Llevar un coche pequeño y malo como nosotros en el primer viaje no es seguro. No te quiero explicar lo que es tener a un león delante metido en un coche más pequeño que el bicho. Te mueres de miedo.
El coche siempre lo he cogido y entregado en el aeropuerto. No son caros pero también es verdad que no alquilamos un 4*4. En Sudáfrica se conduce por la izquierda pero no problema porque el país es tan grande que no tiene apenas tráfico, en las rotondas es donde hay que prestar más atención.
Hay muchas maneras de dormir en el Kruger y en el Kalahari. En los campamentos hay unas preciosas tiendas de campaña acondicionadas con todo lo necesario mientras escuchas en la noche el sonido de la noche africana. No existe nada igual. También hay pequeñas cabañas preparadas como las tiendas de campaña con todo. En la página de los parques sudafricanos tienes la foto de cada cabaña, tienda, precios, y la forma de reservar.
Existe una enorme variedad de excursiones y safaris dentro del Kruger y también en el Kalahari que organiza el propio parque. Te apuntas la tarde anterior. Hay safaris de madrugada (en coche de safari) o marchas a pie (las mejores) y safaris de tarde (en coche de safari) y safaris de noche (en coche de safari) pero LA OBSERVACIÓN DESDE TU PROPIO COCHE es maravillosa y uno puede ir a su ritmo.
La mejor hora para la observación de animales es la madrugada y la caída de la tarde. Es imprescindible levantarte a las 4:30 de la mañana y durante tu estancia en el parque hacer el horario que hacen los animales y cuantos más safaris, mejor.
Las horas de calor desde las 11 hasta las tres y media de la tarde más o menos es para hacer vida de campamento, leer, bañarse en la piscina (algunos campamentos tienen fantásticas piscinas, tomar un aperitivo en las terrazas de los campamentos de Kruger que están situadas en sitios estratégicos para ver toda la selva, acercarse a alguna tienda dentro del parque a por provisiones para la comida o la cena. Hay barbacoas a la salida de cada cabaña o tiendas de dormir donde hacerte tu comida y además, hay en los campamentos principales del Kruger y en alguno del Kalahari, restaurantes para poder comer o cenar si no apetece encender la barbacoa. Las puertas de los campamentos cierran sobre las 17:30 y si te retrasas, te multan. Hay que tener cuidado con eso.
La mejor época para visitar el Kruger es a finales de la época seca desde agosto a finales de octubre donde la falta de agua obliga a los animales a buscarla en los riachuelos y a concentrarse donde hay agua. Nosotros siempre hemos ido en noviembre. A partir del 30 de noviembre hay que tener cuidado porque es época de vacaciones en Sudáfrica y el Kruger se peta. No es agradable que este lleno. Tener en cuenta esta fecha.
Las rutas que se hacen a pie son fantásticas por la selva. Se realizan con rangers y te encuentras a los depredadores frente a frente, una pasada. Me quede con muchas ganas de hacer alguna de las rutas que organizan los parques y que duran dos o tres días durmiendo al raso en la selva. No dejes de hacerlo, debe ser increíble. Os informan en el Kruger. Creo que duraban de domingo a miércoles, estaban limitadas a un numero pequeño de personas y había que hacer la reserva con antelación.
Hay animales por todas partes en el Kruger y lo mismo en el Kalahari.
En el Kruger, cerca de los ríos y charcas (los campamentos de Skukuza, Pretoriuskop, Lower Sabie y Crocodile Bridge) se ven hipopótamos, elefantes, cocodrilos, búfalos y jirafas.
En los campamentos centrales (Satara, Olifants y Letaba) están llenos de antílopes, cebras que atraen a los depredadores como leones o leopardos.
En el norte esta los campamentos de (Shingwedzi y Panda Maria) que no me dio tiempo a conocer, una pena porque deben ser fantásticos, en estos abundan los elefantes y búfalos, así como leopardos.
Además de estos campamentos que te he dicho y que son los principales, hay otros dieciocho campamentos pequeños. En los campamentos grandes (Skukuza, Pretoriuskop, Lower Sabie y Crocodile Bridge Satara, Olifants y Letaba) hay tiendas donde se vende comida y gasoil.
Los cinco campamentos más pequeños son Boulders, Mopani, Jock of the Bushveld, N’wanetsi y Rodewaal tienen un régimen diferente y no tienen restaurante.
Skukuza es uno de los campamentos donde he dormido. Es grande y tiene mucha gente pero está en uno de los caminos mejores para ver animales del Parque. Por ejemplo, podeis pasar una noche en esta campamento y hacer alguna de sus excursiones a pie o en safari, además de las que hagas con vuestro coche. Nosotros estábamos todo el día de ruta de un campamento a otro en nuestro coche para no perder ni un minuto de ver animales salvo las horas de muchísimo calor que no ves nada porque los animales están bajo los árboles. No he estado en el campamento de Lower Sabie (muy lujoso) pequeño y que se encuentra a las orillas de la presa del río Sabie. Se ven elefantes cuando bajan a abrevar al río desde el propio campamento.
Satara es otro de los campamentos donde hemos dormido situado en la zona central del parque. Esta en una zona de buen avistamiento de guepardos y leones. Además, tiene grandes concentraciones de cebras. Me quede con muchísimas ganas de dormir en otro campamento Balule aunque me pude acercar de ruta a verlo. Es pequeño pero os lo aconsejo y mucho. No pude quedarme porque estaba lleno. Tenia diez cabañas que se llenan rápido.
El campamento donde también pudimos dormir y que nos encantó es Olifants. Se encuentra en un alto y domina el río. Desde su fantástica terraza mientras te tomas una cerveza se puede ver a los hipos y a los elefantes bajar a beber al río. En Olifants nos quedamos en tiendas de campaña que eran fantásticas donde podías escuchar en la noche todos los sonidos de la selva, una experiencia inolvidable.
Letaba es otro campamento donde dormimos. Esta al lado del río que le da nombre. Es un campamento grande y es buena zona de avistamiento de animales. Cuanto más al interior del Kruger menos gente por las rutas.
Mopani es otro de los campamentos pequeños y que me quede con ganas de dormir en él y también en Panda Maria que es un pequeño campamento pero con una situación fantástica la zona del rio Luvuvhu y que hace frontera ya con Zimbabue.
He dormido en los que había plazas libres. Me quede con ganas de dormir en el resto pero no pude hacerlo porque no quedaba sitio. Yo no tenia reservado nada porque iba a la aventura. Recomiendo hacer las reservas lo antes posible para que podáis dormir también en Balule y Panda Maria. Imprescindible echar un vistazo a la pagina del Kruger